A los 17 años yo jugaba fútbol, comencé con unos dolores muy fuertes en la cadera y me diagnosticaron artritis seronegativa. Me mantuve súper bien hasta los veintitrés años, cuando apenas podía moverme, me tenían que vestir y bañar. Ahí me diagnosticaron Espondilitis. Estuve en silla de ruedas y con muletas para poder caminar. Fueron momentos muy difíciles
En septiembre de este año -2016- cumplo 8 años con espondilitis, 6 de estos viví yendo a diferentes médicos para saber y tratar de entender que me sucedía, mientras tenia que vivir el día a día. Tras 6 años de dolor y aún sin saber que tenia esta enfermedad, tuve una de aquellas crisis, pero
Todo comenzó cuando desperté con un codo hinchado y sin poder moverlo. Un año después ya tenía varias articulaciones comprometidas y comencé a tener problemas para vestirme, subir escaleras o levantarme de una silla. Fue muy difícil pasar de jugar hockey y bailar flamenco a no poder realizar actividad física, sin saber lo qué estaba pasando. Afortunadamente,
En mi primer año de universidad me diagnosticaron espondilitis anquilosante. En ese momento me sentí machacado y que robaban mi energía, me di cuenta que esto no sería algo pasajero y que nos quedaba un largo camino juntos. Al principio fue muy difícil diagnosticar la enfermedad, normalmente estos dolores nos llevan a consultar traumatólogos que poco saben